11/19/2020

Nace la cuarta área marina protegida más grande del mundo


                                 Tristán de Acuña

Las autoridades de la Isla de Tristán de Acuña decidieron crear una gran zona de protección de fauna marina en un área en el océano Atlántico Sur, tres veces más grande que el Reino Unido, con el objetivo de proteger a las especies que habitan en esta región.

El archipiélago británico es considerado como la isla más remota del mundo y solo cuenta con la presencia de 245 habitantes, en donde se decidió que se prohibirá la pesca y otras actividades de extracción de fauna en un área de 627.247 kilómetros cuadrados en medio del océano.

En ese sentido, especies en peligro como el pingüino de Mosley y el albatros pico fino tendrán una gran zona de protección con el objetivo de garantizar su supervivencia y protección.


Las autoridades explicaron que el santuario de esta isla será la “zona vedada” más grande del océano Atlántico y la cuarta del mundo para proteger los peces y las decenas de millones de aves marinas que se alimentan de ellos.

      Albatros pico fino (Thalassarche chlororhynchos)

El Pew Bertarelli Ocean Legacy Project resaltó que en el área donde está la isla se encuentran el 85% de los pingüinos de Mosley, 11 especies de ballenas y delfines y la mayoría de los lobos marinos subantárticos.

“Nuestra vida en Tristán de Acuña siempre se ha basado en nuestra relación con el mar y así es hoy. Por eso protegemos el 90% de nuestras aguas y nos enorgullece poder cumplir en la Isla un papel crucial para conservar la salud y la fauna de los océanos”, indicó , James Glass, jefe de la isla.

La zona de protección formará parte del Programa Cinturón Azul británico, que asigna 27 millones de libras (35,5 millones de dólares) a la conservación de la vida marina en los territorios de ultramar.

La iniciativa protege 11,1 millones de kilómetros cuadrados de ambiente marino, es decir el 1% de los océanos del mundo, según explicó la oficina del primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson.

Por su parte, la Real Sociedad para la Protección de Aves indicó que este complejo de islas también son el hábitat de varias especies de fauna, especialmente de aves terrestres que no se encuentran en otras partes del mundo, como el yal de Wilkins (el ave más rara de Reino Unido), y el rasconcillo de Tristán (el ave no voladora más pequeña del mundo).

El territorio abarca cuatro islas principales, la más grande es Tristán de Acuña, situada 2.810 kilómetros al oeste de Ciudad del Cabo. Los holandeses la descubrieron en 1643 y Reino Unido tomó posesión en 1816 al instalar el primer asentamiento permanente.


Esta isla cuenta con una gran diversidad de fauna y se encuentra en medio del océano Atlántico entre Brasil y Sudáfrica y por eso esta decisión es fundamental para la protección de gran parte de especies marinas.

11/06/2020

La nueva reserva marina de Sa Dragonera amplía la protección del entorno marino singular de las Islas Baleares


   Dragonera  Antoni Sureda             CC-BY-SA-3.0

Cuenta con una superficie de 457 hectáreas en el sureste de la isla de Mallorca, y será la continuación de la reserva de Levante de Mallorca – Cala Rajada

En su interior destacan las praderas de posidonia oceánica, arrecifes y cuevas sumergidas, donde conviven poblaciones con gran potencial de recuperación, como mero, cabracho o morenas

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha publicado en el Boletín Oficial del Estado la orden por la que se establece la reserva marina de interés pesquero de Sa Dragonera y se definen su delimitación, zonas y usos. Esta nueva reserva cuenta con una superficie de 457 hectáreas en el sureste de la isla de Mallorca, de las que 82 serán de reserva integral (sin usos permitidos salvo el seguimiento científico debidamente autorizado).

La protección de los recursos marinos en esta zona del Mediterráneo es fruto de la estrecha colaboración entre el ministerio y la comunidad autónoma de las Islas Baleares, materializado en un convenio relativo a la gestión compartida de la reserva marina de Levante de Mallorca – Cala Rajada, y que se amplía ahora para incluir en su ámbito de aplicación la reserva marina de Sa Dragonera.

Con esta nueva incorporación se amplía a 12 el número de espacios protegidos que componen la Red de Reservas Marinas de Interés Pesquero de España, 9 en el Mediterráneo y 3 en Canarias.

Las reservas marinas ofrecen protección a más de 103.000 hectáreas, de las que algo más del 10% son zonas de protección integral. Cinco de estas reservas están gestionadas en exclusiva por el Ministerio, porque se encuentran en zonas donde solamente hay aguas exteriores (Masía Blanca, Islas Columbretes, Cabo de Gata – Níjar, Isla de Alborán e Isla de la Palma), mientras que las otras siete son de gestión compartida con las comunidades autónomas ya que existen aguas exteriores e interiores (Levante de Mallorca – Cala Rajada, Sa Dragonera, Isla de Tabarca, Cabo de Palos – Islas Hormigas, Cabo Tiñoso, Isla Graciosa – Islotes del norte de Lanzarote y Punta de la Restinga – Mar de las Calmas).



RESERVA MARINA DE SA DRAGONERA

La reserva marina de Sa Dragonera se caracteriza por su perfil abrupto y fondos rocosos, donde las distintas especies encuentran zonas de protección y abrigo. En su interior destacan las praderas de posidonia oceánica, arrecifes y cuevas sumergidas, donde conviven poblaciones con gran potencial de recuperación, como mero, cabracho, morenas, brótolas, corvina negra, sargos, chopa, doradas y dentón, así como seriolas y espetones.

Asimismo, la nueva reserva va a contribuir a la protección de las aves marinas de la Zona de Especial Interés para las Aves (ZEPA), como la pardela (cenicienta y balear), y la gaviota de Audouin, completando de esta manera la protección y recuperación del hábitat marino en torno a las Islas Baleares.

La zonificación contempla una reserva integral, donde sólo se autorizan trabajos científicos debidamente justificados y una zona de usos restringidos con puntos para el buceo de recreo. Por el exterior de estas dos zonas se permitirá la pesca profesional artesana (palangrillo, potera para calamares y curricán de superficie) y de recreo (curricán de superficie y volantín).

La regulación de las actividades pesqueras (profesionales y recreativas) en aguas exteriores se armoniza con las ya existentes para aguas interiores. Mientras, para las inmersiones de buceo de recreo se ha establecido una regulación adecuada en cuanto a puntos y cupos de inmersión, en consenso con el sector para que su práctica sea compatible con el objetivo de protección.

El convenio con la comunidad autónoma de las Islas Baleares para la colaboración en la gestión de reservas marinas que acaba de ser renovado, con la inclusión de la Reserva Marina de Sa Dragonera, permite optimizar las acciones a realizar de manera conjunta. Estas actuaciones incluyen la vigilancia y control de actividades, la operatividad de los servicios, la conservación de los medios técnicos y la información y divulgación sobre las reservas marinas.

De esta forma, ambas administraciones dispondrán de embarcaciones y medios técnicos específicos, así como las instalaciones para los servicios, y se coordinarán las relaciones institucionales con las administraciones insulares y locales.

RED DE RESERVAS MARINAS

Los espacios que componen la Red de Reservas Marinas son creados por el Ministerio a partir de peticiones del sector artesanal y de la información científica actualizada, con el objetivo principal de fomentar la protección y regeneración de los recursos pesqueros y de sus hábitats, y favorecer la práctica de actividades sostenibles, en especial la pesca artesanal. En sus 34 años de existencia han demostrado los buenos resultados de la zonificación, los planes de gestión y la vigilancia, así como la compatibilidad de los usos pesqueros y de recreo.

En este sentido, las reservas marinas se configuran como uno de los principales exponentes de la política de Crecimiento Azul del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Su gestión se inspira en un enfoque ecosistémico de la pesca, que permite las actividades pesqueras responsables, al tiempo que se realiza un seguimiento de su hábitat, con lo que se contribuye a un mejor conocimiento y la sensibilización de los ciudadanos.

Para un adecuado control de las actividades que tienen lugar en las reservas marinas, el Ministerio dispone de una flota de 18 embarcaciones, de entre 6 y 20 metros de eslora, dos radares instalados en tierra y equipos de visión nocturna, entre otros medios técnicos.

La orden se puede consultar en el siguiente enlace:

https://www.boe.es/boe/dias/2020/11/05/pdfs/BOE-A-2020-13657.pdf

10/30/2020

Descubren un arrecife de coral de 500 metros de altura en Australia

    Schmidt Ocean Institute

Científicos australianos han descubierto un enorme arrecife de coral desprendido en la Gran Barre
ra de Coral. Con más de 500 metros de altura, es más alto que el Empire State Building, la Torre Eiffel o las Torres Petronas. Es el primer gran arrecife que se encuentra en más de 120 años.

El arrecife se encontró el 20 de octubre, cuando un equipo de científicos australianos dirigido por el doctor Robin Beaman de la Universidad James Cook estaba realizando un mapeo submarino del lecho marino del norte de la Gran Barrera de Coral a bordo del buque de investigación Falkor del Schmidt Ocean Institute

Luego, el equipo realizó una inmersión el 25 de octubre utilizando el robot submarino SuBastian de Schmidt Ocean Institute para explorar el nuevo arrecife. La inmersión se transmitió en vivo, y las imágenes de alta resolución se vieron por primera vez y se transmitieron en el sitio web y el canal de YouTube de Schmidt Ocean Institute.

Según un comunicado, la base del arrecife en forma de cuchilla tiene 1,5 kilómetros de ancho, luego se eleva 500 metros hasta su profundidad más baja de solo 40 metros debajo de la superficie del mar.

El líder de la expedición, el Dr. Rob Beaman de JCU, dijo que estaba «sorprendido y entusiasmado» con el descubrimiento.

Este arrecife separado de la Gran Barrera de Coral es el primero que se encuentra en más de 120 años, y se suma a los otros siete altos arrecifes separados en el área, mapeados desde finales del siglo XIX, incluido el arrecife en la isla Raine, el área de anidación de tortugas marinas verdes más importante del mundo.

Otros descubrimientos

Este descubrimiento se suma a un año de hallazgos submarinos realizados por Schmidt Ocean Institute. En abril, los científicos descubrieron la criatura marina más larga registrada: un sifonóforo de 45 m en Ningaloo Canyon, además de hasta 30 nuevas especies.

En agosto, los científicos descubrieron cinco especies no descritas de coral negro y esponjas y registraron la primera observación de Australia de peces escorpión poco comunes en los parques marinos del Mar del Coral y la Gran Barrera de Coral. Y el año comenzó con el descubrimiento en febrero de los cementerios y jardines de coral de aguas profundas en el Parque Marino Bremer Canyon.

«Gracias a las nuevas tecnologías que funcionan como nuestros ojos, oídos y manos en las profundidades del océano, tenemos la capacidad de explorar como nunca antes. Se nos abren nuevos paisajes oceánicos que nos revelan los ecosistemas y las diversas formas de vida que comparten el planeta con nosotros», ha señalado Wendy Schmidt, cofundadora del Schmidt Ocean Institute.




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10/07/2020

Científicos hallan microplásticos en el 78% de los salmonetes, las anchoas o las sardinas


 



Un estudio recién publicado en la revista Marine Pollution Bulletin encontró microplásticos en las cuatro especies analizadas de la plataforma continental del Noroeste Ibérico: sardina, anchoa, salmonete y dragoncillo.


El estudio, co-liderado por los investigadores Jesús Gago del Centro Oceanográfico de Vigo e Izaskun Preciado del Centro Oceanográfico de Santander junto a la participación de Ana Virginia Filgueiras y Ana Cartón- de ambos centros respectivamente-, ha evaluado la incidencia de microplásticos en el contenido del tracto digestivo de cuatro especies de peces muy habituales en nuestras aguas: Engraulis encrasicolus, Sardina pilchardus, Mullus surmuletus y Callionymus lyra.

Se ha estudiado el contenido estomacal de 64 individuos de las cuatro especies de peces seleccionadas, aislando 100 microplásticos: 25 en anchoas, 23 en sardinas, 14 en salmonetes y 38 en dragoncillos. Se han identificado dos tipos de microplásticos: fibras (88%) y fragmentos (12%), siendo los colores más abundantes el transparente en anchoa y sardina, y el azul en salmonete y dragoncillo. Todas las especies presentaban microplásticos en porcentajes que varían del 60 % para el salmonete al 87% para la anchoa y la sardina. El polietileno y el polipropileno fueron los polímeros más abundantes, tal y como era de esperar debido a que son dos de los más utilizados en todo el mundo principalmente como material de embalaje.

La dieta de las especies es un factor determinante en la transmisión de muchos contaminantes a través de la red trófica por lo que, con el fin de estudiar si en el caso de los microplásticos sucede lo mismo, se analizó el contenido estomacal de 787 peces. Se observaron dos formas de alimentación distinta: planctívoros (peces que se alimentan de plancton) y bentívoros (peces que se alimentan de pequeños organismos del fondo marino). Con la ayuda de modelos aditivos generalizados (GAM), se analizó la influencia del tipo de alimentación junto con otras variables biológicas (longitud del individuo, volumen del contenido estomacal, etc.) en el número y tamaño de microplásticos ingeridos.

Las variables relacionadas con la dieta y las conexiones tróficas no han resultado ser tan relevantes como se pensaba inicialmente. La talla de los individuos y su condición corporal sin embargo son variables significativas que explican los cambios en la cantidad y tamaño de los microplásticos ingeridos. Una posible explicación de este hecho puede ser el alto nivel de microplásticos existentes tanto en la columna de agua como en el fondo marino.

Referencia: Filgueiras, A.V., Preciado, I., Cartón, A., Gago, J. (2020) Microplastic ingestión by pelagic and benthic fish and diet A case study in the NW Iberian shelf. Marine Pollution Bulletin 160, 111623.: https://doi.org/10.1016/j.marpolbul.2020.111623

Artículo científico  A case study in the NW Iberian shelf. Marine Pollution Bulletin 160, 111623.





8/21/2020

Flotan hasta 200 millones de toneladas de microplástico en el Océano Atlántico

 

Una nueva y preocupante investigación publicada en la revista 'Nature Communications', apunta que el océano Atlántico podría contener unos 200 millones de toneladas de plástico. Una gran sorpresa que genera mucha preocupación ya que los investigadores calculaban que habría aproximadamente 17 millones de toneladas de plástico en ese océano.

En los últimos años ha mejorado mucho la concienciación contra el uso de plásticos. Sin embargo, queda muchísimo por hacer

El plástico invade los mares de todo el mundo y causa numerosos peligros para todas las especies que vivimos en la Tierra.

El plástico, un problema más grande de lo que creíamos

Según los científicos del Centro Nacional de Oceanografía (NOC), con Katsiaryna Pabortsava a la cabeza, la masa de microplásticos  "invisibles" que se encuentran en las aguas superiores del océano Atlántico es de entre 12 y 21 millones de toneladas, llegando a los 200 millones de toneladas de basura plástica en total en todo el océano que baña el Europa, África y América.

Esta masa de plástico en las aguas superiores del océano Atlántico supone al menos 10 veces más de plástico de lo que se pensaba anteriormente. Durante los últimos 65 años, en el Atlántico han entrado 17 millones de toneladas de plástico. Esto sugiere que se ha subestimado sustancialmente la cantidad de plástico  que llega a ese oceano.

"Anteriormente, no podíamos equilibrar la masa de plástico flotante que observamos con la masa que creíamos que había entrado en el océano desde 1950. Esto se debe a que estudios anteriores no habían medido las concentraciones de partículas microplásticas 'invisibles' debajo de la superficie del océano. Nuestra investigación es la primera en haber hecho esto en todo el Atlántico, desde el Reino Unido hasta las Malvinas", explica Katsiaryna Pabortsava del Centro Nacional de Oceanografía.

El término 'microplástico' fue empleado por primera vez en 2004 en una publicación científica. Estas pequeñas partículas de menos de un milímetro, antes pasaban desapercibidas pero frente a los grandes desechos, los microplásticos se han encontrado casi en todas partes, desde glaciares en los Alpes hasta el cuerpo humano.

Los cálculos y estudios sobre los microplásticos, hace unos años solo medían la contaminación en superficie. 

Richard Lampitt, también del NOC, apunta - tal y como señala Servimedia - que si se asume que la concentración de microplásticos que se mide a unos 200 metros de profundidad es representativa de la de la masa de agua hasta el fondo marino con una profundidad media de unos 3.000 metros, entonces el Atlántico podría contener alrededor de 200 millones de toneladas de basura plástica. "Esto es mucho más de lo que se cree", añade.


"Con el fin de determinar los peligros de la contaminación plástica  para el medio ambiente y para los humanos, necesitamos buenas estimaciones de la cantidad y características de este material, cómo ingresa al océano, cómo se degrada y cómo de tóxico es en estas concentraciones. Este artículo demuestra que los científicos han tenido una comprensión totalmente inadecuada incluso del más simple de estos factores y parece que nuestras estimaciones de cuánto se vierte en el océano se han subestimado enormemente", subraya.

Pabortsava y Lampitt recolectaron muestras de agua de mar durante la expedición 26th Atlantic Meridional Transect entre septiembre y noviembre de 2016.

Acto seguido, filtraron grandes volúmenes de agua de mar a tres profundidades seleccionadas en los 200 metros superiores y detectaron e identificaron contaminantes plásticos utilizando una técnica de imagen con espectroscópicos de última generación.

Su estudio se centró en polietileno, polipropileno y poliestireno, que son los tipos de plástico comercialmente más prominentes y también más desordenados.

Extrapolaron los datos a la superficie y profundidad del océano Atlántico, obteniendo un dato absolutamente desorbitado sobre la cantidad de plástico en sus aguas.

Los residuos plásticos dañan el medio ambiente, es un hecho evidente. Cada vez existen más alternativas en muchos productos para evitar el uso del plástico en el día a dia. Sin embargo es necesario conocer la cantidad y características de los plásticos que actualmente pueblan los mares para conocer su potencial tóxico.


Como apunta Lampitt "este artículo demuestra que los científicos no conocían totalmente la magnitud del problema y que las estimaciones de la cantidad de plástico vertidas en el océano se han subestimado enormemente".

Hacen falta muchas más investigaciones para conocer qa fondo las consecuencias del uso de plásticos de manera habitual y que la población mundial tome conciencia de lo que el plástico provoca en los océanos.

Artículo científico:

High concentrations of plastic hidden beneath the surface of the Atlantic Ocean

8/19/2020

Islas Galápagos sorprende al mundo con 30 nuevas especies de invertebrados marinos


Un equipo multidisciplinario de varias organizaciones descubrió 30 nuevas especies de invertebrados en aguas profundas de las islas Galápagos, informó este lunes el Parque Nacional de ese archipiélago ecuatoriano.

Se han identificado “cuatro especies de langostas okupa, una de coral copa gigante, 10 de corales de bambú, tres de octocorales, una de estrella de mar quebradiza y once de esponjas”., destacó el parque citando un artículo aparecido en la revista Scientific Reports.

Precisó que la expedición llegó hasta los 3 mil 400 metros “utilizando los más modernos vehículos submarinos operados remotamente a bordo del Nautilus (equipado para bajar hasta los 4 mil metros)" los que exploraron por primera vez tres montañas submarinas situadas alrededor de las islas Darwin y Wolf.

ROV Hercules es lanzado para explorar el mar profundo alrededor de las Islas Galápagos. Crédito: Ocean Exploration Trust/Nautilus Live.

“Las profundidades marinas siguen siendo la última frontera de la Tierra y este estudio proporciona un vistazo a las comunidades menos conocidas de las Islas Galápagos", dijo Pelayo Salinas de León, investigador principal de la Fundación Charles Darwin y científico de conservación del proyecto de Mares Prístinos de National Geographic, que dirige este estudio.

"Este mundo, que Darwin nunca vio, representa un entorno único y prístino. Ahora es nuestra responsabilidad asegurarnos de que permanezca así para las generaciones venideras", aseguró el especialista.

El comunicado dijo que la exploración reveló una serie de comunidades submarinas, entre las profundidades de 290 y 3 mil 373 metros, incluyendo múltiples hábitats frágiles, como los jardines de esponjas de cristal, jardines de coral y colonias de coral de agua fría, que son considerados ecosistemas marinos vulnerables.

Gorgonia Marina Blanca, una especie de coral de la familia Primnoidae encontrada en los conos volcánicos poco profundos aproximadamente a 600 metros de profundidad con el submarino Hercules del crucero NA064.  Foto por:  OET/CDF.

Paulo Proaño, ministro del Ambiente, aseguró que este hallazgo confirma que Galápagos "es un laboratorio viviente con procesos biológicos y ecológicos en curso y aún por explorar, que lo convierten en un sitio excepcional que amerita todos nuestros esfuerzos para ser conservado”.

Desde 1979 Galápagos fue designado por la Organización de las Naciones Unidas como Patrimonio Natural de la Humanidad, atendiendo a sus especies únicas en el mundo animales y vegetales, terrestres y marinas, en las que se inspiró el científico inglés Charles Darwin para elaborar su teoría de la evolución de las especies.

Envolturas de huevos de una raya de aguas profundas sobre una almohada de basalto rígido a solo metros de distancia de una fumarola negra. Foto por: OET/CDF.

El comunicado aseguró que para la exploración de las profundidades marinas se utilizaron dos vehículos teledirigidos: Argus y Hércules, además de sistemas de cartografía del fondo marino, mediante los cuales se recogieron muestras biológicas utilizando el brazo manipulador. Los organismos individuales fueron separados, fotografiados y almacenados.

Detalló que al final del crucero, los especímenes se enviaron a renombrados expertos en aguas profundas para su análisis e identificación.

Comunidades biológicas encontradas en las profundidades durante una de las expediciones. Foto por: OET/CDF.

Añadió que el estudio tuvo el apoyo de la Fundación Charles Darwin, en colaboración con el Parque Nacional Galápagos y el Ocean Exploration Trust, con apoyo de la Oficina de Exploración e Investigación de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) para financiar el Programa de Exploración, el Helmsley Charitable Trust y la Fundación Gordon y Betty Moore.

Las islas Galápagos, territorio insular de Ecuador, se encuentran en medio del océano Pacífico a mil kilómetros de las costas de este país.


Artículo científico:

8/18/2020

Más de la mitad de los océanos, afectados por el cambio climático


Más del 50% de los océanos del mundo ya podrían estarse viendo afectados por el cambio climático, y esta cifra aumentará hasta el 80% en las próximas décadas, según ha demostrado un nuevo estudio que publica la revista 'Nature Climate Change'.

Los científicos utilizaron modelos climáticos y observaciones en áreas más profundas del océano en todo el mundo para calcular por primera vez el punto en el que los cambios en las temperaturas y los niveles de sal, buenos indicadores del impacto del cambio climático inducido por el hombre, superarían las variaciones naturales.

El estudio estima que entre el 20 y el 55% de los océanos Atlántico, Pacífico e Índico ahora tienen temperaturas y niveles de sal notablemente diferentes, mientras que esto aumentará al 40-60% a mediados de siglo, y a 55-80% para 2080.

También encontró que los océanos del hemisferio sur se están viendo afectados más rápidamente por el cambio climático que el hemisferio norte, y los cambios se han detectado allí desde la década de 1980.

El profesor Eric Guilyardi, de la Universidad de Reading, en Reino Unido, y del Laboratorio de Oceanografía y Clima (LOCEAN-IPSL), en Francia, destaca: "Hemos estado detectando cambios en la temperatura del océano en la superficie debido al cambio climático durante varias décadas, pero cambios en vastas áreas del océano, particularmente las partes más profundas, son mucho más difíciles de detectar".

Yona Silvy, estudiante de doctorado en el LOCEAN-IPSL y la Universidad de La Sorbona y autora principal del estudio, explica que estaban interesados en saber "si los niveles de temperatura y sal eran lo suficientemente grandes como para superar la variabilidad natural en estas áreas más profundas, es decir, si habían subido o caído más alto de lo que nunca lo harían durante los picos y valles normales, lo que afecta la circulación oceánica global, el aumento del nivel del mar y representa una amenaza para las sociedades humanas y los ecosistemas".

Estudios anteriores han medido el impacto del cambio climático en el océano al observar las temperaturas de la superficie, las precipitaciones y el aumento del nivel del mar, pero pocos han analizado los efectos regionales en las profundidades del océano para obtener una imagen más completa.

Los efectos del cambio climático son más difíciles de detectar en las partes más profundas y aisladas del océano, donde el calor y la sal se propagan a un ritmo más lento debido a procesos de mezcla más débiles. También es difícil en áreas que se observan mal o donde la variabilidad natural es alta.

Yona Silvy y sus colegas utilizaron simulaciones de modelos con y sin el impacto de la actividad humana y un análisis que combina la temperatura y la sal del océano para detectar cambios significativos y su fecha de detección probable, también conocida como "hora de emergencia".

Sin embargo, estas son regiones que conservarán la memoria de estos cambios durante décadas o siglos. Se calculó que los cambios detectables por encima de la variabilidad natural se observarían en los océanos del hemisferio norte entre 2010-2030, lo que significa que es probable que ya se hayan producido aumentos o disminuciones en la temperatura y los niveles de sal.

Los cambios más rápidos y tempranos observados en el hemisferio sur enfatizan la importancia del Océano Austral para el almacenamiento global de calor y carbono, ya que las aguas superficiales se abren paso hacia el océano más profundo con más facilidad allí.

Sin embargo, esta parte del mundo también está particularmente mal observada y muestreada, lo que significa que es probable que los cambios no se detecten durante más tiempo.

Los científicos argumentan que se necesita una mejor observación de los océanos y una mayor inversión en modelos oceánicos para monitorear el alcance del impacto del cambio climático en los océanos del mundo y predecir con mayor precisión el efecto más amplio que esto podría tener en el planeta.

Artículo científico:

Human-induced changes to the global ocean water masses and their time of emergence

7/27/2020

El mundo se ahoga en plásticos: la existencia de plásticos en los Océanos se cuadruplicarán para 2040


¡ Si no se realiza un cambio drástico, las consecuencias serían dramáticas !

The Pew Charitable Trusts y SYSTEMIQ han publicado un informe Breaking the Plastic Wave: A Comprehensive Assessment of Pathways Towards Stopping Ocean Plastic Plastic , uno de los estudios analíticamente más sólidos jamás realizados sobre plásticos oceánicos. Los socios para esta investigación fueron la Universidad de Oxford, la Universidad de Leeds, Common Seas y la Fundación Ellen MacArthur.

Estos son algunos de los puntos de vista sobre las conclusiones del estudio y lo que las empresas y los gobiernos deben hacer ahora para hacer frente a ellos.

Si no se actúa ahora, las existencias de plástico del océano se cuadruplicarán para 2040

La investigación denominada Rompiendo la ola de plástico muestra que, si no actuamos hoy, de manera seria y radical, para el año 2040 el volumen de plástico en el mercado se duplicará; lo referido al otro volumen anual de plástico que ingresa al océano casi se triplicará, de 11 millones de toneladas en 2016 a 29 millones de toneladas en 2040 y las existencias de plástico del océano se cuadruplicarán, llegando a más de 600 millones de toneladas. está en línea con el análisis de 2016 de la Fundación Ellen MacArthur , la cual mostró que podría haber más plástico que peces en el océano para 2050.

Las soluciones se encuentran en una economía circular más generalizada.

Sin embargo, se ha llegado a la conclusión que el problema comienza mucho antes de que el plástico llegue a nuestros océanos y las soluciones también se encuentran en ese nivel.


Hasta ahora, muchos esfuerzos para combatir la contaminación plástica se han centrado estrechamente en mejorar la gestión de residuos o la limpieza. Otros se han centrado solo en prohibiciones y reducción de plásticos. Según el estudio, ninguno de estos funcionará de forma aislada. No podemos reciclar nuestra salida de la contaminación plástica, y tampoco podemos simplemente reducir nuestra salida.

Los investigadores plantean en el documento final de Romper la ola plástica que debemos adoptar un enfoque integral de economía circular . Debemos priorizar repensar lo que se pone en el mercado, al tiempo que aumentamos rápidamente nuestra capacidad de mantenerlo al tanto después de que se haya utilizado.

Cambio de sistema hacia una economía circular, con las mejores resultados

La economía circular considera cada etapa del viaje de un producto, antes y después de que llegue al cliente. Este enfoque no solo es vital para detener la contaminación plástica, sino que, como lo muestra el estudio, ofrece los mayores beneficios económicos, sociales y climáticos. 

En comparación con los negocios habituales, una economía circular tiene el potencial de reducir el volumen anual de plásticos que ingresan a nuestros océanos en un 80%, generar ahorros de USD 200 mil millones por año, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 25% y crear 700,000 adicionales netos puestos de trabajo para 2040. Toda una apuesta integral con beneficios directos, ahora científicamente probados.

El giro de las empresas

El estudio recomienda a las empresas moverse rápidamente para rediseñar todos los artículos de plástico con la finalidad de que sean reutilizables, reciclables o compostables. Para aumentar también nuestra capacidad de recoger y hacer circular estos elementos en la práctica, tenemos que:

- Invertir al menos USD 150 mil millones en recolección y reprocesamiento solo en los próximos cinco años. La infraestructura necesaria para recolectar y circular estos artículos requerirá alrededor de USD 30 mil millones de financiamiento anual continuo en el mejor de los casos. Sin una eliminación y un rediseño significativos, estos costos serían significativamente más altos.

- Establecer con urgencia mecanismos que proporcionen flujos de financiación recurrentes estables con contribuciones justas de la industria, como la responsabilidad extendida del productor (EPR) o iniciativas equivalentes lideradas por la industria, en todo el mundo. Es muy poco probable que este financiamiento provenga solo de los presupuestos gubernamentales, especialmente en el Sur Global, donde existen las mayores brechas de infraestructuras.

El sistema de reciclado de plásticos está fallando en la actualidad: un 20% del plástico ingresa en los sistemas de reciclado, y luego, tras las pérdidas por reciclaje, sólo el 15% de los residuos plásticos a nivel mundial son realmente reciclados.

El estudio confirma necesidad urgente de hacer la transición hacia una economía circular para el plástico.

Artículo científico:

Breaking the Plastic Wave: Top Findings for Preventing Plastic Pollution

Vídeo: https://youtu.be/QG8vNigOML4 Breaking the plástic wave


7/09/2020

La reproducción de los peces, amenazada por el Cambio Climático



Debido a que los peces que están listos para aparearse y sus crías son especialmente sensibles a los cambios de temperatura, en el futuro hasta el 60% de todas las especies pueden verse obligadas a abandonar sus áreas de desove tradicionales, según publican los investigadores en la revista Science.

En un nuevo metaestudio, expertos del Instituto Alfred Wegener, Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina (AWI), en Alemania, han publicado hallazgos innovadores sobre los efectos del cambio climático para las poblaciones de peces en todo el mundo.

Según informan, los riesgos para los peces son mucho más altos de lo que se suponía anteriormente, sobre todo por el hecho de que en ciertas etapas de desarrollo son especialmente sensibles al aumento de la temperatura del agua. Precisamente, un cuello de botella crítico en el ciclo de vida de los peces es su baja tolerancia al calor durante el apareamiento.

En otras palabras, la temperatura del agua en sus áreas de desove determina en gran medida el éxito de la reproducción, haciendo que los peces sean particularmente vulnerables a los impactos del cambio climático, no solo en el océano, sino también en lagos, estanques y ríos.

Según los análisis de los investigadores, si no se controla, el cambio climático y el aumento de la temperatura del agua afectarán negativamente la reproducción de hasta el 60% de todas las especies de peces.

Los organismos tienen que respirar para que sus cuerpos produzcan energía y esto es igualmente cierto tanto para los seres humanos como para los peces. Además, sabemos que las necesidades energéticas de humanos y animales dependen de la temperatura: cuando hace más calor, la necesidad de energía aumenta exponencialmente y, con ello, la necesidad de oxígeno.

Sobre esta base, se deduce que los organismos solo pueden adaptarse al aumento de la temperatura en sus inmediaciones al proporcionar a sus cuerpos más oxígeno. Pero hay ciertos límites específicos de especie en esta habilidad. Si se exceden esos límites, puede conducir al colapso cardiovascular.

A partir de este conocimiento, en un nuevo metaestudio, los expertos han investigado en qué fases de la vida los peces de agua salada y dulce en todo el mundo son más sensibles al calor. Para hacerlo, los biólogos recopilaron datos científicos sobre la tolerancia a la temperatura de 694 especies de peces y analizaron los rangos de temperatura dentro de los cuales los peces pueden sobrevivir como adultos listos para aparearse, como embriones en huevos, larvas y adultos fuera de la temporada de apareamiento.

Los ecosistemas experimentarán una caída en la productividad

 

"Nuestros hallazgos muestran que, tanto como embriones en los huevos como los adultos listos para aparearse, los peces son mucho más sensibles al calor que en su estado larval o adultos sexualmente maduros fuera de la temporada de apareamiento –explica el primer autor y biólogo marino de AWI, el doctor Flemming Dahlke–. En el promedio mundial, por ejemplo, los adultos fuera de la temporada de apareamiento pueden sobrevivir en aguas que son hasta 10 grados más cálidas que los adultos listos para aparearse o los huevos de pescado".

La razón de esta tolerancia a la temperatura variable radica en la anatomía de los peces: los embriones de peces no tienen branquias que les permitan absorber más oxígeno. Por el contrario, los peces que están listos para aparearse producen óvulos y espermatozoides. Esta masa corporal adicional también necesita oxígeno, por lo que, incluso a temperaturas más bajas, sus sistemas cardiovasculares están bajo una enorme presión.

Estos hallazgos se aplican a todas las especies de peces y aclaran por qué los peces son sensibles al calor, especialmente durante la temporada de apareamiento y en su etapa embrionaria. En consecuencia, en un segundo paso, el equipo de investigadores analizó en qué medida la temperatura del agua en las áreas de desove de las especies investigadas probablemente aumentaría debido al cambio climático.

Sus conclusiones confirman que cada grado Celsius de calentamiento significa más problemas para las poblaciones de peces del mundo. "Si los seres humanos podemos limitar con éxito el calentamiento climático a 1,5 grados centígrados para el año 2100, solo el 10% de las especies de peces que investigamos se verán obligados a abandonar sus áreas de desove tradicionales debido al aumento de las temperaturas", explica el biólogo y coautor de AWI Profesor Hans-Otto Pörtner.

Por el contrario, si las emisiones de gases de efecto invernadero permanecen en un nivel alto o muy alto (SSP 5 - 8.5), es probable que produzca un calentamiento promedio de 5 grados o más, lo que pondría en peligro hasta el 60% de todas las especies de peces.

Las especies afectadas se verían obligadas a adaptarse a través de la evolución biológica, un proceso que probablemente tomaría demasiado tiempo, o a aparearse en otra época del año o en otro lugar.

"Algunas especies podrían manejar con éxito este cambio –señala Flemming Dahlke–. Pero si se considera el hecho de que los peces han adaptado sus patrones de apareamiento a hábitats específicos durante períodos de tiempo extremadamente largos, y han adaptado sus ciclos de apareamiento a corrientes oceánicas específicas y a las fuentes de alimento disponibles, hay que asumir que ser obligados a abandonar sus zonas normales de desove significará grandes problemas para ellos".

Además, los peces que viven en ríos y lagos tienen el problema de que su hábitat está limitado por el tamaño y la ubicación geográfica de las aguas en las que viven: la migración a aguas más profundas o a regiones más frías es casi imposible.

"Nuestros análisis detallados, que cubren todas las etapas de desarrollo de los peces, nos ayudarán a comprender cómo estas especies están siendo afectadas por el cambio climático y en qué medida la pérdida de hábitats adecuados está siendo impulsada por la transformación de los ecosistemas relacionada con el clima", asegura Hans-Otto Pörtner.

Dondequiera que migren los peces o disminuyan sus tasas de reproducción, habrá nuevas interacciones entre especies y, en algunos casos, los ecosistemas experimentarán una caída en la productividad.

Artículo científico: Thermal bottlenecks in the life cycle define climate vulnerability of fish


6/26/2020

Sorprendente hallazgo: descubrieron cuatro nuevas especies en el fondo del océano

Moanammina semicircularis en el fondo marino. Crédito de la foto: Jennifer Durden y Craig Smith, Deep CCZ Project.

Dos nuevos géneros y cuatro nuevas especies de xenofóforos unicelulares gigantes (protozoos pertenecientes a un grupo llamado Foraminifera) fueron descubiertos en el Océano Pacífico profundo durante un proyecto conjunto entre científicos de la Universidad de Hawaiʻi en Mānoa , el Centro Nacional de Oceanografía, Centro Nacional Oceánico del Reino Unido ( NOC ) y la Universidad de Ginebra. Los hallazgos fueron publicados esta semana en European Journal of Protistology disponible en Science Direct .

'Moana' ha inspirado el nombre de Moanammina para uno de los nuevos géneros, mientras que el segundo ha sido nombrado Abyssalia en reconocimiento a su hábitat abisal.

Las descripciones de las especies requirieron dos años de estudios detallados de morfología y datos genéticos, utilizando especímenes recolectados con el vehículo operado de forma remota Luʻukai de UH en una expedición a la zona occidental Clarion Clipperton Zone ( CCZ ) a bordo del RV Kilo Moana en 2018. El fondo marino en esta área es más de tres millas de profundidad. La CCZ ocupa una vasta franja del Océano Pacífico con extensos depósitos de nódulos polimetálicos en el fondo marino, y está destinada a la minería en aguas profundas.

Estábamos entusiasmados de encontrar estos nuevos y hermosos xenofóforos", dijo Andrew Gooday, profesor de NOC y autor principal. “Parecía apropiado nombrar uno después de 'Moana', una palabra hawaiana que significa océano. Los xenofóforos son uno de los tipos más comunes de organismos grandes que se encuentran en las llanuras abisales de CCZ , por lo que se eligió el nombre del segundo género para reflejar esto ".

Al igual que algunos otros tipos de foraminíferos, los xenofóforos construyen conchas, llamadas pruebas, compuestas de partículas que obtienen del ambiente circundante. Estas son estructuras elaboradas que pueden alcanzar tamaños de cuatro pulgadas o más.

Moanammina semicircularis sp. nov. , la nueva especie del nuevo género, tiene una prueba en forma de abanico acechada, de alrededor de tres pulgadas de alto y tres y media pulgadas de ancho. Otras dos especies nuevas, Abyssalia foliformis sp. nov. y Abyssalia sphaerica sp. nov. , tiene pruebas que se asemejan a una hoja plana y una esfera casi perfecta. Son notables por estar construidas completamente con espículas de esponja de vidrio. La cuarta nueva especie es Psammina tenuis sp. nov. , que tiene una prueba delicada, delgada, en forma de placa.
Especimen de Abyssalia, un nuevo género de esponjas - SLIM CHRAITI, UNIVERSITY OF GENEVA.

"¡La abundancia y diversidad de estos organismos unicelulares gigantes es realmente sorprendente!" dijo el oceanógrafo Craig Smith de la Escuela de Ciencia y Tecnología del Océano y la Tierra de UH Mānoa ( SOEST ), coautor y científico jefe del crucero RV Kilo Moana en el que se descubrieron los xenofóforos. “Los vemos en todas partes en el fondo marino en muchas formas y tamaños diferentes. Claramente son miembros muy importantes de las comunidades biológicas ricas que viven en la CCZ. Entre otras cosas, proporcionan microhabitats y posibles fuentes de alimentos para otros organismos. Necesitamos aprender mucho más sobre la ecología de estos protozoos extraños si deseamos comprender completamente cómo la minería del fondo marino podría afectar a estas comunidades del fondo marino ”.
Artículo científico:



5/27/2020

El Cambio Climático tendrá un gran impacto en la vida del océano profundo

Imagen: Schmidt Ocean Institute

Las profundidades de los océanos se están calentando a un ritmo más lento que la superficie. Sin embargo, las criaturas que habitan estas capas también están expuestas al cambio climático y tendrán dificultades para conservar sus hábitats en el futuro.

Esta es la principal conclusión de un estudio internacional publicado este lunes en la revista Nature Climate Change y dirigido por la Universidad de Queensland (Australia), que ha contado con la participación de la Universidad de Hokkaido (Japón).

Para llegar a sus conclusiones, los investigadores utilizaron una métrica conocida como “velocidad climática” que define la probable velocidad y dirección en que una especie cambia a medida que el océano se calienta, explica Isaac Brito Morales, uno de sus autores, en un comunicado de la Universidad de Queensland.

De esta forma, el equipo de científicos calculó la velocidad climática en todo el océano durante los últimos 50 años, mientras que para la obtención de resultados del resto del presente siglo utilizaron datos de once modelos climáticos.

“Esto nos permitió comparar la velocidad climática en cuatro zonas de profundidad del océano, evaluando en qué zonas la biodiversidad podría cambiar más su distribución como respuesta al cambio climático“, detalla Brito Morales.

Los investigadores descubrieron que la velocidad del clima es actualmente el doble de rápida en la superficie debido al mayor calentamiento de la misma; como resultado, las especies que viven a mayor profundidad tienen menos probabilidades de estar en riesgo por el cambio climático que las que viven en la superficie.

Velocidad climática (kilómetros por década) para temperaturas oceánicas globales modernas (1955-2005 años) y futuras pronosticadas (2050-2100 años) en tres escenarios de emisiones de gases de efecto invernadero del IPCC (RCP2.6, RCP4.5 y RCP8.5)
Isaac Brito-Morales et al. / Nature Climate Change, 2020

“Sin embargo, para finales de siglo, suponiendo que tengamos un futuro de altas emisiones, no solo habrá un calentamiento mucho mayor en la superficie, sino que este calor penetrará más profundamente”, explica Brito Morales.

Según este estudio, en la capa mesopelágica del océano (200-1000 metros), donde existe una gran abundancia de peces pequeños que sirven de alimento para animales más grandes, las velocidades climáticas se aceleraron hasta 11 veces la tasa actual.

Debido al tamaño del océano, el calentamiento ya absorbido en la superficie se mezclará con aguas más profundas, lo que significa que la vida marina se enfrentará a crecientes amenazas por el calentamiento hasta finales de siglo.

El investigador Anthony Richardson, de la misma universidad, opina que reducir las emisiones de carbono “es vital para controlar el calentamiento y ayudar a controlar las velocidades climáticas en las capas superficiales del océano para 2100”.
En esa línea, el ecólogo climático de la Universidad de Hokkaido, Jorge García Molinos, quien ha participado en la investigación, recomienda “seguir un enfoque de precaución que limite los efectos negativos de otras actividades humanas como la minería y la pesca en las profundidades”.

Artículo científico:

Climate velocity reveals increasing exposure of deep-ocean biodiversity to future warming


5/26/2020

Hippocampus Nalu, una nueva especie de caballito de mar pigmeo descubierta en Sudáfrica

Los caballitos de mar pigmeo, son animales marinos que usualmente habitan en los arrecifes a profundidades entre 16 y 40 metros, en las costas de Indonesia, Filipinas, Papúa Nueva Guinea, Queensland (Australia) y Nueva Caledonia. Sin embargo, una nueva especie descrita extiendo el hábitat de estos peculiares animales hasta las costas Sudafricanas.


El estudio sobre la nueva especie publicado en la revista ZooKyes, fue realizado en medio del proyecto Knysna Basin, por un equipo de especialistas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza “UICN”, los cuales descubrieron la nueva especie de caballito de mar pigmeo al noreste de Sudáfrica y la primera especie de este tipo registrada en el océano indico.

Hippocampus nalu in situ, SAMC-F041933, holotipo, hembra, Sodwana Bay, Sudáfrica a 14 m de profundidad (fotografía Richard Smith /oceanrealmimages.com).

Los investigadores han bautizado la nueva especie como el Hippocampus nalu sp. nov, nombre dado en reconocimiento a la región de Savannah, en donde hábitat este increíble pez en los arrecifes de coral arenosos planos a unos 14 y 17 metros de profundidad de la Bahía de Sodwana, Sudáfrica.

Hippocampus nalu in situ, SAMC-F041934, holotipo, macho, Sodwana Bay, Sudáfrica a 14 m de profundidad (fotografía Richard Smith /oceanrealmimages.com).

Los caballitos de mar pigmeos se han registrado previamente en todo el Indopacífico central con distribuciones que van desde Tailandia, Indonesia, Filipinas, Palau, Papua Nueva Guinea, Australia, Islas Salomón, Nueva Caledonia, Vanuatu, Fiji, hasta Taiwán, el centro de Japón y la nueva especie registrada recientemente en las costas del noroeste de Sudáfrica.


Hippocampus nalu sp. Nov,  se constituye en el primer registro confirmado de un verdadero caballito de mar pigmeo de África, el cual se distingue principalmente de sus congéneres pigmeos de caballito de mar por su morfología de columna muy distinta a lo largo de los segmentos anteriores de la cresta superior del tronco y por una amplia divergencia genética comprobada tras los análisis molecular.

Short G, Claassens L, Smith R, De Brauwer M, Hamilton H, Stat M, Harasti D (2020) Hippocampus nalu, a new species of pygmy seahorse from South Africa, and the first record of a pygmy seahorse from the Indian Ocean (Teleostei, Syngnathidae

Al igual, el Hippocampus nalu sp. nov. representa el octavo miembro del clado de caballitos de mar pigmeos que se describirá desde el Indo-Pacífico, el primer registro confirmado del continente africano y el Océano Índico, y una extensión de más de 8000 km más allá del rango previamente conocido de caballitos de mar pigmeos del centro y el Indo-Pacífico occidental.

Artículo científico: Hippocampus nalu, a new species of pygmy seahorse from South Africa, and the first record of a pygmy seahorse from the Indian Ocean (Teleostei, Syngnathidae)

https://zookeys.pensoft.net/article/50924/

5/22/2020

El cambio climático está cubriendo de verde zonas de la Antártida


              Floración de algas


Científicos han elaborado el primer mapa a gran escala del 'inicio de un nuevo ecosistema' en la península Antártica a medida que florecen algas microscópicas en la superficie de la nieve derretida. Las algas tiñen el paisaje de verde y pueden convertirse en una potencial fuente de alimentos para otras especies. 



En algunas zonas, estas formas de vida unicelulares son tan densas que la nieve derretida queda verde brillante y se pueden ver desde el espacio, según un estudio publicado el pasado miércoles en la revista académica Nature Communications.
Biólogos de la Universidad de Cambridge y del Departamento Británico para la Antártida estuvieron seis años localizando y midiendo las algas verdes en la nieve, utilizando una combinación de datos satelitales y observación de campo.
El resultado es el primer mapa de algas a gran escala peninsular, que será utilizado como punto de referencia para establecer la velocidad a la que el continente blanco se está volviendo verde debido a la crisis climática y potencialmente ofreciendo alimento a otras especies.


Imagen a y c-las islas Adelaide y King George. Imagen b- Isla Anchorage (febrero de 2020)

Ya han descubierto que las algas se están relacionando con pequeñas esporas de hongos y bacterias. "Se ha formado una comunidad. Esto podría potencialmente generar nuevos hábitats. Es el inicio de un nuevo ecosistema", ha afirmado Matt Davey, de la Universidad de Cambridge, uno de los científicos que ha dirigido el estudio. Davey describe el mapa de algas como la pieza que faltaba en el puzzle del ciclo del carbono de la Antártida.

El mapa identifica 1.679 proliferaciones de algas verdes de nieve, que en total cubren una superficie de 1,9 kilómetros cuadrados, algo equivalente a un sumidero de carbono de unas 479 toneladas al año. Esto equivale a las emisiones de unos 875.000 viajes en coche en Reino Unido, aunque en términos globales es muy pequeño como para modificar el balance de carbono del planeta.
Casi dos tercios de las algas verdes fueron halladas en pequeñas islas bajas al norte de la península, un área que ha sido de las que más ha aumentado su temperatura en todo el mundo. Se espera que esa zona bata récords de temperaturas este verano. Las algas de nieve se han desarrollado de formas menos visibles en las regiones más frías del sur.















 Imagen a-  a Muestreo realizado en la región de la península Fildes de la Isla Rey Jorge.   Los círculos rosados ​​muestran ubicaciones de muestreo desde las cuales se registraron los factores de reflectancia direccional hemisférica hiperespectral de algas de nieve (HDRF) y se tomaron algas / nieve para análisis biogeoquímicos. Los círculos naranjas indican la ubicación de las bases de investigación y los triángulos verdes indican la ubicación de las colonias de pingüinos  

 Los científicos observaron previamente un aumento de líquenes y musgo, pero estas formaciones crecen a un ritmo mucho más lento que el de las algas. En el futuro, también registrarán el desarrollo de algas rojas y naranjas, y analizarán la forma en  la que la presencia de estas algas coloridas puede estar generando un impacto en el albedo de la nieve, es decir en su capacidad de reflejar la radiación o el calor que incide sobre ella.
Creo que estas proliferaciones aumentarán en el futuro. Pero debemos analizar los datos numéricos para saber si esto tendrá un impacto significativo en el balance de carbono o en el albedo de la superficie", ha remarcado Andrew Gray, autor principal del estudio.



Artículo científico :
Remote sensing reveals Antarctic green snow algae as important terrestrial carbon sink
https://www.nature.com/articles/s41467-020-16018-w