3/29/2022

Los delfines machos mejoran su vida social silbándose unos a otros, según un estudio

   NASA  delfín mular, tursón o nariz de botella (Tursiops truncatus 

Los delfines se silban unos a otros como parte de un ritual de unión masculina y confían en sus acompañantes para competir por el afecto de las posibles parejas, según descubrió una nueva investigación. Expertos de la Universidad de Bristol dijeron que los delfines nariz de botella pueden volverse más populares simplemente a través de intercambios vocales, ayudándolos a mantener relaciones sociales más débiles pero vitales.

No solo esto, sino que un estudio separado que utilizó los mismos datos encontró que cuanto más popular es un delfín con otros machos, más éxito tiene cuando se trata de producir crías. Esta investigación dirigida por la Universidad de Zúrich develó que los grupos de delfines nariz de botella machos trabajan juntos para competir con grupos rivales por el acceso a las hembras, y los machos más populares del grupo tienen el mejor éxito de apareamiento.

Mientras tanto, el estudio de Bristol descubrió que los delfines machos son capaces de seguir siendo populares mediante intercambios vocales agudos con otros machos como una forma económica de mantener sus alianzas, en lugar de otras actividades de vinculación física. Los expertos dicen que esta es una interacción importante para mantener cuando los grupos se vuelven más grandes y aumenta la competencia por los recursos.

La autora principal, Emma Chereskin, estudiante de la Universidad de Bristol, dijo: “Muchos animales, incluidos los humanos, usan el contacto táctil para fortalecer y reafirmar relaciones importantes. Pero a medida que aumenta el número de relaciones sociales cercanas, también aumentan las demandas de tiempo y espacio disponibles para el mantenimiento de la relación a través del contacto físico. Los delfines nariz de botella machos forman alianzas estratégicas de varios niveles, y queríamos saber cómo mantenían relaciones de alianzas múltiples en grupos grandes”.

Aunque se sabe que los delfines machos utilizan el contacto físico, como las caricias suaves, para conectar con aliados fuertemente vinculados, la investigación de la Universidad de Bristol muestra que dependen de intercambios vocales menos exigentes en cuanto al tiempo para permanecer conectados con aliados más débiles.

Los científicos utilizaron nueve años de datos acústicos y de comportamiento de una población de delfines en Shark Bay, Australia Occidental, lo que les ayudó a evaluar cómo los delfines machos se unían entre sí. Los delfines nariz de botella se unen para cazar o protegerse de los depredadores. Los machos adultos viven principalmente solos o en grupos de dos o tres y se unen a las manadas por períodos cortos de tiempo. Por lo general, suman alrededor de 10 a 30 miembros, aunque se han registrado “superpods” de más de 1.000.

La autora principal del estudio, la doctora Stephanie King, también de Bristol, sostuvo: “Encontramos dentro de las alianzas centrales de delfines, aliados fuertemente vinculados que participaban en un comportamiento de contacto más afiliativo, como caricias y frotamientos, mientras que aliados débilmente vinculados participaban en más intercambios de silbidos. Esto ilustra que estas relaciones sociales más débiles pero aún clave se pueden mantener con intercambios vocales”.

Respalda la teoría del antropólogo británico Robin Dunbar de que las vocalizaciones y el lenguaje evolucionaron para sustituir el acicalamiento. Los grupos cada vez más numerosos exigían un tiempo imposible para el contacto físico. Chereskin declaró: “Nuestros hallazgos aportan nuevas pruebas de que los intercambios vocales pueden tener una función vinculante. Pero, lo que es más importante, y en consonancia con la hipótesis de la vinculación social, los intercambios vocales pueden funcionar como un sustituto de la vinculación física, permitiendo a los delfines machos aliados ‘vincularse a distancia’. Estas pruebas en apoyo de la hipótesis del vínculo social fuera del linaje de los primates plantean nuevas y apasionantes cuestiones sobre los orígenes y la evolución del lenguaje en los distintos taxones”.

Los delfines macho de Shark Bay (Australia Occidental) viven en grupos sociales complejos en los que forman vínculos duraderos para cooperar con otros machos. Para ello, se unen en grandes alianzas estables. Dentro de estas alianzas, los machos forman grupos más pequeños y menos estables de dos a tres para aparearse con las hembras, robarlas de otras alianzas o defenderse de los ataques, según los investigadores dirigidos por la Universidad de Zúrich.

“Este tipo de cooperación masculina con fines de reproducción es muy inusual en el reino animal”, remarcó Livia Gerber, exestudiante de doctorado en el Departamento de Antropología de la Universidad de Zúrich. “Solo se ha observado en una forma mucho menos compleja en algunos otros primates”.

Junto con un equipo internacional dirigido por el profesor de la UZH Michael Krützen, quería averiguar si la compleja vida social de los delfines afectaba el éxito reproductivo de los machos o si, como en la mayoría de las otras especies, los machos más fuertes o experimentados tienen más probabilidades de engendrar descendencia.

Los investigadores analizaron 30 años de datos de comportamiento de 85 delfines machos y utilizaron datos genéticos para realizar análisis de paternidad para más de 400 delfines. El estudio mostró que los machos “populares” bien integrados con fuertes lazos sociales con muchos compañeros de alianza producen la mayor cantidad de descendencia. Gerber dijo: “Los machos bien integrados podrían estar en una mejor posición para aprovechar los beneficios de la cooperación y acceder a recursos cruciales como alimentos o parejas. También pueden ser más resistentes a la pérdida de pareja en comparación con aquellos con pocas parejas, pero más cercanas”.

Los delfines nariz de botella habitan en mares cálidos y templados de todo el mundo y se encuentran en todas partes excepto alrededor del Ártico y la Antártida. Son reconocidos por su inteligencia, utilizan esponjas marinas como herramientas para alcanzar alimentos que normalmente serían inaccesibles y se comunican a través de sonidos pulsados, clics y lenguaje corporal.

Artículo científico: Allied male dolphins use vocal exchanges to “bond at a distance”