2/13/2023

El excremento de ballena desempeña un papel importante en el fitoplancton y contribuye en pequeña medida en la lucha contra el cambio climático, según un estudio noruego.


En verano,15.000 rorcuales aliblancos acuden a Svalbard ( Noruega) para alimentarse, y cada uno de ellos produce unos 40 kilos de heces al día. Eso hace un total de 600 toneladas de caca de ballena. Para el ecosistema vale su peso en oro.

En los últimos años, varios científicos marinos han empezado a preguntarse si las heces de ballena podrían aumentar la producción primaria en el océano. En otras palabras, la caca de ballena podría ser significativa para las importantes floraciones de fitoplancton, que son vitales para toda la cadena alimentaria y para todo lo que vive en el océano.

Su idea es simplemente que las heces fertilizan el océano del mismo modo que el ganado vacuno y ovino fertiliza la tierra.

A diferencia de las heces de los peces y el zooplancton, que se hunden en el fondo marino, las de las ballenas flotan en la superficie. Precisamente donde florece el fitoplancton en primavera y verano.

"El problema es que nadie sabe realmente cuántos nutrientes excretan las ballenas y en qué medida contribuyen a la producción de fitoplancton", explica Carla Freitas, científica marina.

En el pasado, los científicos habían recogido muestras de heces del agua, donde ya se disolvían los nutrientes. Pero esta vez los investigadores las tomaron directamente de las heces de rorcuales aliblancos que habían sido capturados por balleneros comerciales.
Mapa de la zona de estudio

Tras analizar las muestras, los científicos descubrieron que los nutrientes más importantes de las heces eran el fósforo y el nitrógeno.

A continuación calcularon la cantidad de nutrientes excretados cada día por los 15.000 rorcuales aliblancos de la zona de Svalbard en verano, unas 10 toneladas de fósforo y 7 toneladas de nitrógeno al día.

"Según una estimación aproximada, las cacas de rorcual aliblanco aportan entre el 0,2 y el 4 por ciento de la producción diaria de fitoplancton de la zona. Puede que no parezca mucho, pero en realidad es una contribución bastante significativa", afirma Freitas.

Estos resultados se han publicado recientemente en la revista Progress in Oceanography.