La tripulación del buque de investigación Neil Armstrong, operado por WHOI, se prepara para desplegar un extractor de sedimentos en el lecho marino de la Fosa de Puerto Rico. Foto: PAUL WALCZAK, OREGON STATE UNIVERSITY
El Instituto Oceanográfico Woods Hole (WHOI) recolectó una muestra de sedimento cilíndrico de 12 metros de largo de la parte más profunda de la Fosa de Puerto Rico, a casi -8,000 metros.
Este núcleo de muestra ha batido récords como el núcleo más profundo jamás recolectado en el Océano Atlántico, y quizás el núcleo más profundo recolectado en cualquier océano.
Los núcleos de sedimentos largos generalmente se recolectan permitiendo que el tubo central con peso de plomo en la parte superior caiga al agua y a los sedimentos blandos que se acumulan en el lecho marino durante un largo período de tiempo. Cuando la tubería se retira del fondo del mar y se lleva de vuelta al barco, el sedimento recuperado en el interior se puede utilizar para estudiar las condiciones ambientales y el clima de la Tierra, que se remontan a decenas, cientos de miles o incluso millones de años.
Los investigadores también están interesados en comprender las propiedades genéticas que permiten a los organismos microscópicos sobrevivir en los sedimentos del fondo marino. El objetivo principal de esta expedición era comprender mejor cómo los microbios a diferentes profundidades debajo del lecho marino se adaptaron a las muy diferentes condiciones ambientales presentes en todo el rango de profundidad de la zanja.
Durante las tres semanas en el mar, el equipo recolectó núcleos desde una profundidad de agua de unos 50 metros (165 pies) hasta una profundidad máxima de zanja de unos 8.385 metros (27.510 pies). La investigación se realizó con la nave WHOI de Neil Armstrong.
“Tomamos estos núcleos para descubrir cómo los microbios que viven bajo el lecho marino responden a la presión”, dijo el profesor y líder del equipo de investigación Steven D’Hondt. “Nuestro objetivo final es mejorar nuestra comprensión de cómo los organismos en ambientes extremos interactúan con el mundo exterior. El éxito de nuestro equipo en obtener este núcleo de la parte más profunda del Océano Atlántico nos permitirá hacer un gran avance en nuestra comprensión de este pequeña – parte familiar de la vida en la Tierra.
Referencia: Woods Hole Oceanographic Institution