Image Credit from: EcoHealth Alliance
Científicos de la NOAA Fisheries Service y sus socios estatales y sin fines de lucro utilizaron con éxito en el mar la sedación química para ayudar a cortar las cuerdas restantes de una joven ballena del Atlántico Norte el 15 de enero frente a las costas de Cabo Cañaveral, Florida.
El sedante dado a la ballena ha permitido al equipo de desenredo abordar con seguridad al animal y eliminar 50 pies de cuerda que la envolvían alrededor de la boca y sus aletas.
Esta es la segunda vez que una ballena en libertad ha sido sedada con éxito para permitir los trabajos de desenredo. La primera vez que una ballena fue sedada con éxito y desenredada fue en marzo de 2009, también frente a las costas de Florida.
"Nuestros progresos recientes en la sedación química son importantes porque es menos estresante para el animal, y reduce al mínimo la cantidad de tiempo dedicado a trabajar en estos animales al tiempo que maximiza la eficacia de las operaciones de desenredo", dijo Jamison Smith, del Atlantic Large Whale Disentanglement Coordinator for NOAA’s Fisheries Service. "Este desenredo fue especialmente complejo, pero resultó exitoso debido a la planificación detallada y la experiencia colectiva de los muchos socios que participaron con su respuesta".
La joven hembra de ballena, nacida durante la temporada 2008-2009, se estima que tiene aproximadamente 30 pies de largo (10 metros) y se observó enredada inicialmente el día de Navidad por un equipo de reconocimiento aéreo. El 30 de diciembre, un equipo de socorristas capacitados del Georgia "Department of Natural Resources and Florida Fish and Wildlife Conservation Commission" fueron capaces de eliminar 150 pies de cuerda de la ballena, pero se mantuvo la cuerda adicional. NOAA y sus socios siguieron la pista del animal a través de etiquetas de satélite para determinar si el animal hubiera abandonado la cuerda restante por su cuenta. Condiciones de calma y buen tiempo eran necesarios antes de intentar una nueva intervención el 15 de enero.
Durante esta respuesta, los científicos utilizaron por primera vez una etiqueta digital de vigilancia especial que registra el comportamiento de la ballena antes, durante y después de la sedación. Sedar a las grandes ballenas en el mar está en sus comienzos y los datos recogidos en la etiqueta de archivos digitales se utilizarán para informar a los futuros intentos de sedación que puedan ser necesarios. Después de desenredar la ballena, los científicos administraron una dosis de antibióticos para tratar las heridas del enredo y medicamentos para revertir la sedación. A la ballena se le realizará un seguimiento de hasta 30 días a través de una etiqueta de satélite temporal.
El equipo científico veterinario y de desenredo lo integraban: NOAA Fisheries Service, Georgia Department of Natural Resources, Florida Fish and Wildlife Conservation Commission, Woods Hole Oceanographic Institution, University of Florida, EcoHealth Alliance, y Coastwise Consulting. El Provincetown Center for Coastal Studies y el New England Aquarium también prestaron apoyo desde el exterior.
Las artes de pesca retiradas de esta ballena incluían cuerdas y material de malla metálica, similares a los que se encuentran en trampas de pesca para cangrejo y langosta a lo largo del Atlántico medio, al noreste de EE.UU., y las costas de Canadá. Sin embargo, la pesca específica y su origen geográfico se encuentran pendientes de examen por expertos del Servicio de Pesquerías de NOAA.
Es la misma ballena franca del Atlántico Norte que ya fue asistida a finales del 2010.
Con sólo 300 a 400 en existencia, las ballenas francas del Atlántico Norte se encuentran entre las ballenas más amenazadas del mundo. Choques con embarcaciones y las artes de pesca fijas son las dos mayores amenazas para su recuperación.